DE MUERTOS, HERIDOS Y PRESOS: LA HUELGA DE
CANANEA EN 1906.
Introducción
El evento de la Huelga de Cananea en 1906, en su
conjunto, fue un suceso muy manipulado por las autoridades de todos los niveles
y por Greene, pero particularmente, la parte de la contabilidad de los muertos
y heridos, y de no ser por escasos relatos de testigos presenciales que han
sobrevivido al tiempo y de algunos periódicos de la época que registraron
principalmente la muerte de americanos, sería imposible obtener una cifra, que
dentro de un rango, pudiera darnos una idea del número total de muertos que
hubo en los enfrentamientos que se dieron entre los mineros y los americanos,
además de los muertos que hubo durante la represión del movimiento por parte del
Col. Emilio Kosterlitzky y el Gral. Luis E. Torres, una vez que tuvieron el
control de la ciudad a partir de las 7:00 de la tarde del día 2 de junio.
Además, es conveniente incluir y dar nombre a algunos de esos
fallecidos, aunque sea de manera parcial, ya que la lista oficial de muertos y
heridos es a todas luces incompleta, aunque difícilmente se llegará a saber
algún día el número de muertos y sus nombres, ya que las autoridades
municipales estuvieron muy activas las noches del sábado 2 y domingo 3 de
junio, enterrando muertos mexicanos sin una identificación previa, con la
finalidad de ocultar y minimizar el impacto de lo ocurrido el día 2 de junio
con la llegada de los rangers a Cananea y lo que hicieron los rurales y el
ejército cuando tomaron el control de la ciudad. Por otra parte, los mineros,
al menos en el enfrentamiento de la maderería, recogieron a sus muertos y
heridos, mismos que no fueron contabilizados en su totalidad por las
autoridades en sus reportes.
Las muertes ocurridas en los tres días que duraron los
hechos más violentos de la huelga las podemos separar en 4 eventos: 1) En la
maderería ubicada en la Calle Octava Este entre Sinaloa y Chihuahua (Hoy Álvaro
Obregón), en la tarde del 1 de junio entre mexicanos y americanos; 2) En la
calle Sonora y Tercera Este en la tarde del 1 de junio entre mexicanos y
americanos; 3) Tiene como escenario la zona entre las calles Primera y Tercera
Oeste, principalmente en la Av. Sonora (la cuesta de la Gruta) y las vías del
tren hasta el puente a Cananea Vieja en El Ronquillo, ocurrido la tarde del día
2 de junio, también entre mexicanos y americanos apoyados por policías
mexicanos, y 4) Tiene como escenario toda la ciudad y alrededores una vez que
llega el Col. Kosterlitzky y a las 7:00 de la tarde del día 2 de junio inicia
el control de la ciudad, reforzándose la represión de los mineros en la mañana
del día 3 de junio con la llegada del Gral. Torres, represión que culmina días
después, con la captura de los principales líderes huelguistas.
1er Evento: Maderería.
A eso de las 4:30 de la tarde del día 1 de junio cuando la
manifestación de mineros llega a la maderería y George A. Metcalf después de su
fallido intento por rechazar a los obreros con agua, dispara sobre la multitud
matando a una persona, posteriormente es perseguido por la multitud, donde
muere a pedradas y con 18 piquetes de candelabros mineros puntiagudos, después
de matar a otro obrero de un balazo. Los obreros enfurecidos ya habían prendido
fuego a la oficina de la maderería.
William D. Metcalf armado se precipitó por las escaleras
y tomando una de las callejuelas o pasillos, disparó varios tiros sobre la
multitud, misma que lo persiguió, lo alcanzan cuatro jóvenes huelguistas y
lucharon con él, mató a tres (Amavisca, Silva y N.N.), hirió al último en un
dedo (Arcadio Ledezma) y murió a manos de este de un disparo. Cuatro cadáveres
quedaron en un llanito que se encontraba al otro lado del puente que comunicaba
dos secciones de la maderería, dos frente a la oficina y otro en un pasillo.
Otro día, en la revisión de los escombros de la
maderería, se encontraron los restos de tres cuerpos casi totalmente calcinados
en
una esquina de un edificio. Uno
de los calcinados era Ed Howard originario de Santa Bárbara, CA., que tenía un
día trabajando en la maderería.
El diario Arizona Republican del 4 de junio de 1906
menciona que además de los Metcalf, dos hombres de a caballo que participaron
en el manejo de la manguera, también murieron (Bert Lockey y N.N.). Bert Lockey
fue golpeado hasta morir con el cráneo aplastado.
El semanario Arizona Silver Belt del 7 de junio de 1906
reporta que durante este enfrentamiento murió el contador de la maderería,
aunque no lo menciona, probablemente su nombre era Burt Bush, de acuerdo a lo
que declara Greene, donde lamenta la muerte de los Metcalf y de Burt Bush,
seguramente por ser el personal de más confianza en la maderería.
En el Resultando 13º de la Resolutiva dictada por el Primer Ministro
Lic. Seráfico Robles, Secretario del Supremo Tribunal de Justicia del estado de
Sonora, de fecha 10 de agosto de 1908, donde confirma la sentencia dictada el 8
de mayo de 1908 por el juez 2o de primera instancia del distrito de Arizpe a
los prisioneros de la Huelga de Cananea de 1906, los policías Jesús Carpio y
Pedro Sosteaga declaran:
“ que fueron enviados a guardar el orden a la maderería, que cuando
llegaron, la multitud rompía las puertas y vidrieras del establecimiento y
decían que iban a prenderle fuego; que suponen por los amotinados, que los de
la maderería los habían recibido con chorros de agua y haciéndoles fuego; que
al imponer el orden, Carpio fue agredido cuchillo en mano por Tomás Rico, al
ver esto, Sosteaga sacó la pistola y se la quitó, según él, un tal Rudesindo,
habiéndose retirado a dar parte porque no pudieron contener a la multitud.”
En el Resultando 3º de la Resolutiva, el alcaide Francisco Ortiz
manifestó haber detenido, de entre los huelguistas que regresaban de la
maderería incendiada, a Cesáreo Vázquez, Antonio Q. Murrieta, Arturo Vizcarra,
Nieves Castro, Heliodoro Guzmán, Waldo Medina, Pedro Castro y Homobono Albé.
R.T. Lockie, testigo presencial, quien recibió una herida
en la mejilla derecha, era empleado con su padre en el aserradero de la
maderería y comenta que los Metcalf antes de morir mataron a siete mexicanos
entre los dos.
Jesús Silva Herzog en su libro Breve Historia de la Revolución Mexicana,
Los Antecedentes y La Etapa Maderista (1995), cuando narra este enfrentamiento
dice:
“…la respuesta fue una lluvia de piedras y la
contrarrespuesta un tiro que mató instantáneamente a un obrero. La lucha
comenzó. Los dos hermanos Metcalf y diez trabajadores mexicanos murieron en el
primer encuentro”.
MUERTOS, HERIDOS Y PRESOS (1er
EVENTO)
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NACIONALIDAD
|
MUERTOS
|
HERIDOS
|
PRESOS
|
MEXICANOS
|
5 a 10
|
2 a ??
|
8
|
N.N. CALCINADOS
|
2
|
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AMERICANOS
|
6*
|
1
|
|
TOTAL
|
13 a 18
|
3 a ??
|
8
|
*Incluye un calcinado.
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2do Evento: Av. Sonora y Tercera Este.
Hay cierta confusión en la narración de este segundo
enfrentamiento por parte de personas participantes, presenciales e
historiadores, debido a que las narrativas de unos y otros, no coincide en
cuanto al sitio y forma del enfrentamiento, ya que los mineros, después de
recoger a sus muertos y heridos, dejaron la maderería en llamas y se
encaminaron por la Av. Chihuahua, al parecer en la Calle Cuarta Este o Quinta
Este, cruzaron hacia la Av. Sonora, una parte se encaminó rumbo al sur, hacia el
Palacio Municipal y el resto se encaminó rumbo a El Ronquillo por la Av, Sonora.
Hay versiones que dicen que el enfrentamiento fue en la Av. Chihuahua y Calle
Tercera Este, mientras que hay otras que dicen que fue en la Av. Sonora y Calle
Tercera Este. Lo único en lo que hay concordancia, salvo por la versión de
Greene y Dwight, es que la balacera inicia a una señal dada desde un vehículo,
de los dos que acompañaban a Greene, que interrumpen la marcha de los
huelguistas al bloquear el avance de la columna de huelguistas por la avenida.
En este evento se incluyen también los muertos, heridos y presos que resultaron
del enfrentamiento entre policías y huelguistas frente a los montepíos de
Isidro Barragán Chávez y Juan Pons.
C. L. Sonnichsen en su libro: Colonel
Greene and the Copper Skyrocket (1974),
acerca de este enfrentamiento comenta:
“Estaban cerca del Palacio cuando al cruzar
la avenida Chihuahua y la Calle Tercera (Este), una descarga de armas de
fuego abrió heridas sangrantes en la carne de los proletarios. Seis hombres
cayeron muertos, entre ellos un niño de menos de once años. La masacre a sangre
fría y premeditada, había comenzado. Los trabajadores indignados como estaban,
no podían repeler la agresión. Desarmados, repelían los disparos con
maldiciones y piedras, manteniendo un enfrentamiento desesperado y desigual.
Para
agravar sus crímenes, cuentan algunos mexicanos, las estadounidenses utilizaron
balas dum-dum (expansivas), proporcionadas por Greene, que arrastran
hueso y carne, dejando un enorme agujero.”
Dionisio García Rojas quien trabajaba en la Mina
Oversight y fue participante durante la huelga, al respecto de este
enfrentamiento, en sus memorias manuscritas de la huelga, comenta:
“Habiendo llegado los gringos al crucero de
la Calle Segunda Este y Av. Chihuahua (Hoy Álvaro Obregón), allí se le reunió
Mr. Green en su automóvil, el grueso de la manifestación venía por la Av.
Chihuahua y al encontrarse se oyó una descarga de fusilería, cayendo acribillados
por las balas del capital 6 compañeros y heridos otros 8 (número ilegible), de los muertos conocí a Pedro Anaya, Dolores o Doroteo Valdespeña,
José Ma. Avilés (a) Pepe, Margarito, Ostos; heridos Pedro Morrallo (Borrallo), Enrique Vizcarra, Juan Cota, Desiderio
Hernández.”
En el Resultando 4º de la Resolutiva de fecha 10 de
agosto de 1908, en su declaración el jefe de policía Rafael López y los agentes
Manuel L. Castro y Antonio Ahumada expresaron:
“Que consumados tales delitos (la muerte de los Metcalf e incendio de la
maderería) los huelguistas fueron al
Ronquillo por las avenidas Sonora y Principal (Chihuahua), teniendo un encuentro con varios
americanos del que hubo algunos muertos y heridos. El policía Manuel L. Castro
declara que entre los americanos conoció al señor W. C. Greene y al superintendente
de la compañía y tanto este declarante como el policía Antonio Ahumada aseguran
que los disparos partieron del grupo de los americanos.”
En el Resultando 6º de la misma Resolutiva de fecha 10 de
agosto de 1908, el policía Francisco Méndez comenta:
“….que vio como treinta americanos
apertrechados en la avenida Sonora con dos automóviles llenos de americanos,
también vio a uno de los que montaban los automóviles, a su parecer, dar
órdenes de fuego, pues en seguida dispararon los americanos contra un grupo de
gente que pasaba por la calle mencionada; que supone que los amotinados no
portaban armas pues no les vio ninguna a los que pudo distinguir.”
En el Resultando 10º de la misma Resolutiva, William C.
Greene y Artur Dwight presidente y Superintendente de la Cananea Consolidated Copper
Company, respectivamente, hacen una declaración muy vaga sobre este
enfrentamiento, sin mencionar el sitio exacto del tiroteo, diciendo:
“….viendo que la multitud regresaba gritando
¡¡al banco, al banco!!, con objeto de impedir que fuera saqueada esa oficina y
pensando que tendría autoridad bastante con la gente para hacerla retroceder,
dirigió su automóvil hacia el gentío; que en ese momento llegaron armados
algunos empleados de la compañía, entre ellos Mr. Dwight, quien pretendió hacer
regresar a los hombres que corrían cogiéndolos de los brazos, que en ese
momento uno de la multitud descargó sobre Mr. Dwight su pistola y entonces sus
empleados hicieron fuego y lo mataron. Siguieron algunos disparos, sin saber
quién de sus empleados dispararía. Artur Dwight relacionó los hechos con la
parte conducente, tal cual lo hizo W.C. Greene, añadiendo que él disparó una
pistola que traía contra un individuo que también disparó contra él, sin saber
si lo heriría o no.”
En el Resultando 21º de la Resolutiva, refiriéndose a la
declaración de un testigo presencial dice:
“Francisco Carmelo, como testigo presencial
de los hechos ocurridos en la calle de Sonora, los deja referidos tal como los
deja relatados, ignorando quienes serían los autores de las desgracias
causadas, así como los promotores del movimiento huelguista.”
Leopoldo Rodríguez Calderón, director de la escuela
pública en 1906 y testigo presencial, aunque no dice el lugar exacto, hace una
descripción muy detallada de este enfrentamiento, comentando:
“Al llegar el grupo de huelguistas en frente
del Palacio, se oyó una fuerte descarga de fusilería por el rumbo donde estaba
míster Greene apostado en la bocacalle de una de las calles que unen las dos
avenidas por el Poniente. Un grupo de pacíficos ciudadanos, que por la curiosidad
consiguiente se dirigían hacia el lugar donde estaban los huelguistas, fueron
derribados por las balas de los americanos que acompañaban a míster Greene,
balas que rompieron varias de las escaleras de las casas de los señores
licenciado Trinidad Peña, señora viuda de Quiroga, señor Francisco Carmelo y
clareando por seis partes la casa de una familia de ancianos que está a un lado
de las anteriores, rompieron una lámpara en una de las piezas interiores. De
resultas de la descarga murieron cinco personas, una de ellas gravemente herida
en el vientre y un niño en un muslo, muriendo ambos al día siguiente. Entre los
muertos estaba un albañil que a esa hora trabajaba en una casa que ahí se está
construyendo y que es de la propiedad del señor Pablo Rubio, comisario de
Ronquillo…..”
Los huelguista al ver la masacre a la que se estaban
enfrentando desarmados, unos corrieron a los montepíos a sacar armas y
municiones, el alcaide Francisco Ortiz fue al montepío de El Ronquillo, propiedad
de Isidro Barragán Chávez, con 20 hombres armados a impedir el saqueo que los
huelguistas hacían, y dice que los recibieron a balazos, contestando el fuego,
habiendo resultado herido Manuel Montijo (muere al siguiente día). Además,
fueron aprehendidos Francisco Zamora, Refugio Cázares, Hermenegildo Ríos y
Refugio Alcántar, recogiéndoseles dos pistolas y dos rifles.
En el Resultando 14º de la Resolutiva, donde declaran los
mineros heridos durante este enfrentamiento, dice:
“…los heridos Desiderio Hernández, Pablo
Cobache, Prudencio Fierro, Anastasio Salazar, Pedro Martínez, Amado Pérez,
Pedro Borrayo, Antonio Rodríguez, y Matías Soto, dicen que ignoran quienes
fueron sus heridores, suponiendo la mayor parte de ellos que serían grupos de
americanos.”
Jesús Morales Tapia dice que en la página 37 del informe
del Presidente Municipal Filiberto Vázquez Barroso, donde menciona los muertos
de este evento, informa que unos fueron recogidos en el callejón a la vuelta de
la cárcel (Cjón. J. Ma. Morelos y Pavón y Tercera Este) y otros fueron
recogidos sobre la Av. Sonora, lo que nos indica que el enfrentamiento fue en
la zona de la Av. Sonora y Tercera Este o al menos esta zona formó parte del
enfrentamiento. Los muertos recogidos en estos sitios mencionados son: Librado
Oceguera, Alberto Stone, Filomeno Morales, Petronilo Esparza (López) y Pedro
Amaya.
La casa de Greene se había convertido en refugio de la
mayoría de los americanos residentes y visitantes en Cananea que aún no habían
huido de Cananea, se encontraba fuertemente custodiada por americanos y en la
noche, un mexicano que llegaba de Naco a pie, sin tener conocimiento de los
ocurrido durante el día, se le ocurrió pasar frente a la casa y fue abatido a
balazos por los guardias.
Existe una carta de Colin Bury, trabajador americano de
la empresa, que envió a su madre Susan S. Bury, quien vivía en Phoenix, Ariz.
La carta está fechada en Cananea el 3 de junio de 1906, y al respecto dice:
“Mientras yo estaba muerto para el mundo (Nadie sabía que estaba en la cárcel desde
las 3 de la tarde por portar una escopeta y sale hasta las 9:30 p.m.)….se había producido una pelea en la que
once mexicanos fueron asesinados.”
MUERTOS, HERIDOS Y PRESOS (2do
EVENTO)
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NACIONALIDAD
|
MUERTOS
|
HERIDOS
|
PRESOS
|
MEXICANOS
|
7 a 11*
|
??
|
4
|
AMERICANOS
|
0
|
0
|
1
|
TOTAL
|
7 a 11
|
??
|
5
|
*Incluye un niño de 11 años.
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 |
Velación de una víctima de la huelga (Probablemente José Orozco)
(Arizona Historical Society. Tomada de:Sonnichsen, C. L.)
|
3er Evento: Primera, Tercera Oeste y Av.
Sonora (Cuesta La Gruta).
Otro día, el sábado 2
de junio por la mañana, en las esquinas de las calles había grupos de
ciudadanos buscando informarse de los sucesos del día anterior, mientras su
indignación aumentaba al ver que constantemente eran encarcelados grupos de mineros
y ciudadanos que se atrevían a manifestar su descontento, mientras que a los americanos
nadie los molestaba. A eso de las nueve de la mañana, como reguero de pólvora,
se corrió por toda la ciudad la noticia de que el gobernador Izábal llegaría en
tren especial y con fuerzas mexicanas para desarmar a los americanos que recorrían
la ciudad en grupos armados de rifles, pistolas y con una o dos cananas de
tiros cruzadas en el pecho.
Empleados municipales
y del gobierno, así como muchos comerciantes de la ciudad, hicieron presencia
en la estación del ferrocarril, unos por curiosidad y otros por rendir
pleitesía al Gobernador y a la fuerza mexicana que se creía lo escoltaba. Como
a las diez y media se escuchó el silbato de la locomotora y todos quisieron
ocupar un lugar cómodo desde donde presenciar este singular evento. Llegó el
tren formado de seis carros de pasajeros y al apearse el señor Gobernador, al
que acompañaban varias personas de Hermosillo, entre ellas el señor Aguilar,
prefecto político del Distrito y el comandante Barrón, comenzaron a oírse
hurras y gritos de entusiasmo de los americanos pues los cinco carros restantes
venían repletos de americanos, todos armados, encontrándose entre ellos
doscientos setenta y cinco soldados de las fuerzas rurales (Rangers) del
Distrito de Arizona al mando del coronel Rynning, que supuestamente venían como
voluntarios a defender los intereses de los americanos que residían en Cananea,
quienes después se apostarían en los principales edificios de la empresa y en
los alrededores de la Casa de Greene.
Este enfrentamiento
inicia cerca de las 3 de la tarde frente al puente de El Ronquillo, cuando un
americano insulta a un grupo de mexicanos para provocarlos, los mexicanos
responden con otro insulto. Se escuchó un disparo, el americano en retirada
seguía disparando dejando dos muertos antes de escapar por el terraplén de la
vía del tren, comenzando de esta forma un nuevo enfrentamiento que se extendió
desde el puente hasta la iglesia en construcción y toda la ladera ubicada al
norte de la Av. Sonora (Cuesta La Gruta), donde los americanos tenían la
ventaja, ya que se encontraban apostados en los puntos más altos desde la Mesa
hasta El Ronquillo, incluyendo el puente, desde donde cazaban por turnos a todo
lo que se movía, matando incluso, a un anciano que se le ocurrió pasar por una
de las calles arriando un burro cargado de zacate.
En el Resultando 21º de la Resolutiva, durante la
consignación de Al Owens el policía Ladislao Pesqueira declaró:
“……que
el día 2 estaba en el Ronquillo donde seguía a un grupo de huelguistas, que en
la tarde vio pasar a unos americanos en automóvil y uno de ellos disparó su
arma matando sin motivo a un mexicano cuyo nombre ignora; que nadie había
atacado al referido automóvil y que parece que el primer disparo fue la señal
de ataque; pues luego otros americanos que estaban en el puente del Ronquillo,
y de los cuales conoció únicamente a Al Owens, siguieron disparando, haciéndolo
Owens en contra del declarante sin acertar el tiro, que hizo blanco en el
caballo que montaba, por lo que lo aprehendió, (el juzgado dio fe de la herida
del caballo).”
A lo largo de la
ladera que conducía al Hotel Los Ángeles, los estadounidenses y policías
mexicanos se habían atrincherado detrás de rocas, mientras que un pequeño grupo
de americanos dirigido por Frank Moson, arrastrándose en lo alto del puente del
ferrocarril, hacía fuego sobre los mexicanos que se encontraban abajo, punto
que resultó ser estratégico para los americanos durante toda esa tarde, desde
donde fueron asesinados muchos mexicanos y evitó que estos ascendieran por esa
zona a La Mesa, que se encontraba fuertemente resguardada por Rangers,
voluntarios americanos y empleados de la empresa. Todo esto fue observado por
los vecinos de La Mesa desde los Hoteles Los Ángeles, Unión, de la Mesa, D. and
A., la Lavandería Americana y la casa de Greene.
Dionisio García Rojas, al respecto de este enfrentamiento
y desde otra perspectiva y momento, en sus memorias comenta:
“Se
organizó un grupo de jóvenes de La Campana capitaneados por Eleazar Amavisca y
su hermano José Ángel. Éramos como unos 10, de estos 4 estaban armados, los 2
“Amavizcas” y Fco. Gracia, Goyo no sé cómo se apellida, el resto vamos con la
esperanza de armarnos de los primeros que “allemos”, nos fuimos al Ronquillo,
“atravezamos” el cerro del –ilegible- (hoy Planta Nueva -sic-), entramos por la calle Durango, y nos
“posesionamos” debajo del puente (puente de madera que existió en la
Durango y Tercera Oeste hasta 1935),
hasta las 4 de la tarde que pasó un gringo a caballo y fue abatido, pero más
tardó en caer que más de 20 manos se aferraban al rifle…..”
Cerca de las 5 de la
tarde en el Hotel de la Mesa, localizado a un lado del Hotel Los Ángeles, murió
en el interior un hombre llamado Carl Haigler, fue muerto a balazos por
mexicanos que dispararon desde los cimientos de la iglesia que ya estaba en
construcción. Esta persona se encontraba en la escalera en el interior del
edificio cuando una bala le atravesó la cabeza y su cuerpo rodó por las
escaleras, como consecuencia de esto, el resto de los huéspedes del hotel se
refugió en la casa de Greene.
Durante el desarrollo de este enfrentamiento, el
reportero del Bisbee Daily Review, Mackenzie Nesbit, un joven de poco más de 20
años de edad, durante la tarde recibió un balazo en el brazo que le destrozó el
codo.
Bert (Leroy) Rush, un
cantinero, fue asesinado durante la tarde en la zona de los salones, fue
encontrado frente al Salón Fashion en el Ronquillo. En esta misma zona, cerca
de la media noche hubo un encuentro entre mexicanos y americanos, donde hubo
algunos muertos y heridos. Al respecto, en el Resultando 12º de la Resolutiva, dice:
“El 2 de junio a las doce de la noche el jefe
de la policía dio parte de que por el rumbo de “los salones” había varios
muertos y heridos como resultado de un enfrentamiento entre mexicanos y
americanos, continuación de los acontecimientos del día anterior, se mandó averiguar
nuevamente lo sucedido y se dio fe de los heridos y muertos que constan en el
resultando 15º del fallo de 1ª instancia.”
Colin Bury, en la carta dirigida a su madre Susan S.
Bury, fechada en Cananea el 3 de junio de 1906, sobre este enfrentamiento
comenta:
El Sábado por la mañana no había mucho que
hacer, pero por la tarde comenzó la pelea en torno al gran caballete del
ferrocarril en El Ronquillo (El puente de Cananea Vieja todavía era de caballetes de madera)……y treinta mexicanos y nueve americanos
fueron asesinados. La lucha intermitente continuó hasta la mañana.
Y
seguía narrando:
“Hubo un trágico incidente bastante cerca de
casa. El Sr. (Conrad) Kubler, carpintero de la casa redonda,
trabajó todo el día de ayer en el coche privado "Cananea" del Coronel
Greene, y regresó a su casa por la tarde alrededor de las 6 p.m., se afeitó y
se acercó a la cabecera de La Mesa. Él se había regresado y estaba a menos de
cien metros de su casa cuando fue derribado. Vi su cuerpo hoy. Una bala le
atravesó el cuello y tenía otras tres heridas en el pecho. Antier por la mañana
estuve hablando con él en la casa redonda, y él estaba bromeando acerca de no
tratar de detener las balas. El detuvo cuatro.”
W. B. Kelly editor del Bisbee Daily Review, quien
acompaño a los rangers a Cananea, como testigo presencial, en la edición del
periódico de fecha 3 de junio de 1906, escribió:
“Una estimación conservadora del número de mexicanos
asesinados de las 3 de la tarde hasta la puesta del sol es de quince”.
MUERTOS, HERIDOS Y PRESOS (3er
EVENTO)
|
|||
NACIONALIDAD
|
MUERTOS
|
HERIDOS
|
PRESOS
|
MEXICANOS
|
15 a 30
|
??
|
??
|
AMERICANOS
|
4 a 9
|
1
|
1
|
TOTAL
|
19 a 39
|
??
|
??
|
4to Evento: Toda la ciudad y alrededores
Emilio Kosterlitzky hace su entrada a Cananea a las 6:30
p.m. por un camino localizado exactamente al norte de la casa de Greene, lo que
ahora sería la Calle del Puente en Cananea Vieja que se prolonga al Ejido hasta
llegar a la carretera a Imuris. Se dirige al Hotel Club (Private Club) que se
localizaba frente de la Comisaría del Ronquillo (Al lado del Hospital de El
Ronquillo), donde se encontraba Rafael Izábal. Se dice que Kosterlitzky en
lugar de recibir instrucciones de Izábal, este lo regañó por haber permitido la
entrada de los Rangers a territorio nacional, amenazándolo e inteligentemente
exigiéndole que se retiraran lo antes posible.
Kosterlitzky después entrevistarse con Izábal, se dedicó
a recorrer Cananea en compañía de Greene. Para las 7 p.m. ya había iniciado el
control de la ciudad, proclamando la ley marcial y que no debían salir de sus
casas, aun así, durante toda la noche, esporádicamente se escuchaban disparos,
producto de tiroteos entre mexicanos y americanos, y entre los Rurales y los
obreros. Por otra parte, mientras se instituía el toque de queda, se preparaba
el tren donde se regresarían los Ranger a Naco, retorno que iniciarían a las
10:00 p.m., custodiados por Kosterlitzky y los Rurales, terminando así, este
negro episodio de la historia de México.
El día 3 de junio fueron capturados ocho “líderes” de los
anarquistas de Cananea que “incitaron los disturbios y la huelga” en la CCCC,
fueron detenidos en un valle por los Rurales al mando de Kosterlitzky y a unas cuadras
de El Ronquillo, sobre las colinas de Cananea, a las 9 de esa mañana Kosterlitzky
forma un pelotón de fusilamiento, alinea a los obreros al lado de una pared de
piedra y gritó:
"¡¡Viva México!! ¡¡Así mueren todos los traidores!!"
Sin temor los hombres
respondieron:
"¡¡Al diablo con el gobierno!!" “¡¡Vamos
con México!! "
Enrique Flores Magón en sus memorias escritas por Samuel
Kaplan, describe que una vez que llegó el Gral. Luis Torres al mando de los
federales, sucedió un evento en el que varios mineros fueron llevados al
cementerio y se les ordena:
“¡¡A cavar, hijos de la chingada¡¡
Lívidos con las manos temblorosas cavaron sus
propias tumbas, posteriormente fueron alineados y”
“¡¡Fuego¡¡
Se oyó, y cayeron acribillados en las fosas.”
En este mismo libro, Enrique Flores Magón menciona que
otros mineros de los que se encontraban presos, fueron sacados de la prisión y
ahorcados. Desafortunadamente, como en el caso de los fusilados, no menciona
quienes ni cuantos fueron los que murieron de esta forma.
El día de la llegada de Kosterlitzky y Torres y días
posteriores, se llevaron a cabo un sinnúmero de arrestos, principalmente de
gente que se manifestaba en las calles protestando por lo que habían hecho los
rangers y empleados gringos de la empresa, pero en su gran mayoría fueron liberados
uno o dos días después. También fueron arrestados algunos de los líderes
anarquistas, entre ellos, fue apresado Lázaro Gutiérrez de Lara el día 3 de
junio, pero fue liberado por falta de méritos en su contra y huye a Estados
Unidos. Después, el 5 de junio fueron aprehendidos Esteban B. Calderón, Manuel M. Diéguez, y
Francisco Ibarra; a quienes se les encontraron varios manuscritos que los comprometían.
Durante los cateos que hicieron a los domicilios de los líderes,
se incluyó también la casa de Salvador Alvarado Rubio (Después fue general
constitucionalista y Gobernador de Yucatán), dueño de una farmacia donde se
hacían las reuniones del Club Liberal de Cananea. Cuando las autoridades tocan
a la puerta, Salvador Alvarado dice a su esposa que no abra, Alvarado logra
escapar, posteriormente las autoridades entran a la casa, golpean a su esposa
para que de informes de su paradero, pero se les pasa la mano y muere de la
golpiza.
En el Resultando 25º de la Resolutiva, donde se establece
la consignación de algunos detenidos y sus causas, dice:
“El comisario de policía consignó por haber
andado escandalizando armados y por haber marcado el alto a las fuerzas del
capitán Barrón, gritándole “quien vive” a Manuel León, Jesús P. Preciado,
Feliciano J. Rodríguez, Eduardo S. Briggs, Teodoro Miranda, Alejandro Aragón,
Sabino López, Cesáreo Flores, Juan Padilla, Telésforo Martínez, Federico Rosas,
Felipe Godoy y Lázaro Montalvo, de los cuales León y Briggs traían armas. Estos
dos negaron que les hubieran recogido armas, y como todos los demás, negaron en
las declaraciones respectivas su participación en los hechos escandalosos
referidos. El comandante Luis Medina Barrón, jefe aprehensor, se proclamó de
acuerdo a la consignación. Careados Medina Barrón y los detenidos, nada se
adelantó, y por auto del 1º, se decretó la libertad de Briggs y López y por
auto de 11, la formal prisión de los demás.”
Además de los detenidos antes mencionados, por diferentes
causas también fueron apresados: José López, Antonio Q. Murrieta, Tomás Rico, Pedro
Bonillas, Rafael J. Castro, Manuel León, Jesús P. Preciado, Feliciano J.
Rodríguez, Eduardo S. Briggs, Teodoro Miranda, Alejandro Aragón, Sabino López,
Cesáreo Flores, Juan Padilla, Telésforo Martínez, Federico Rosas, Felipe Godoy,
Lázaro Montalvo, Jesús Pérez, José López, Crisanto L. Diéguez, Nicomedes
Huizar, Blas Valdés y José Betancourt.
En el Considerando Primero de la Resolutiva se establece:
“Que ejecutoriado el auto de fecha 9 de julio
de 1907 en que se mandó poner en libertad a la mayoría de los procesados,
ejecutoriada también la sentencia de 1ª instancia por lo relativo a Francisco
M. Ibarra, e interpuesto el recurso de apelación por parte de Diéguez y Calderón,
la Sala tiene que ocuparse únicamente de la sentencia recurrida en lo que hace
relación a los mencionados apelantes.”
En el Fallo Primero de la Resolutiva se confirma la
primera de las proposiciones resolutivas del fallo de 1ª instancia, que
considera:
“….a Manuel M. Diéguez y Esteban B. Calderón
a sufrir la pena de quince años de obras públicas, contados desde el día 13 de
junio de 1906, en que fueron declarado formalmente presos; esta condenación se
hace por los delitos acumulados de asonada o motín: destrucción en propiedad
ajena, por incendio; contra la industria; homicidio y lesiones; y se revoca la
condenación hecha a los reos en cuanto a los delitos de atentados contra las
personas y apología de rebelión y sedición, de los cuales se absuelve.”
De esta manera, con Resolutiva de fecha 10 de agosto de
1908 se confirma la sentencia de 15 años a los principales líderes
anarco-magonistas, de los cuales purgaron 5 años en la prisión de San Juan de
Ulúa, hasta que fueron liberados por León de la Barra presidente provisional de
la República, mediante la expedición de la Ley General de Amnistía del 27 de
mayo de 1911.
MUERTOS, HERIDOS Y PRESOS (4to
EVENTO)
|
|||
NACIONALIDAD
|
MUERTOS
|
HERIDOS
|
PRESOS
|
MEXICANOS
|
9 a ??
|
??
|
48*
|
AMERICANOS
|
0
|
0
|
0
|
TOTAL
|
9 a ??
|
??
|
48
|
*La mayoría fueron liberados sin
cargos.
|
|||
 |
| Mineros arrestados y condenados a prisión por participar en la huelga de 1906. |
Lista oficial de muertos y heridos
Del reporte oficial que presenta el Presidente Municipal
de Cananea en 1906, Filiberto Vázquez Barroso, se vislumbra la gran
manipulación que se hizo de los eventos de la huelga, incluyendo los muertos y
heridos, por un lado, la lista únicamente incluye los muertos y heridos de los
días viernes 1 y sábado 2 de junio, y por otro, está incompleta, ya que excluye
a algunos de los muertos de los eventos de los dos días, sobre todo la víctimas
que nada tenían que ver con la huelga y a varios americanos; sin mencionar que
desde la llegada de Kosterlitzky y Torres, también hubo muertos y de ellos no
existe ningún reporte, salvo las menciones que se hacen en los periódicos de la
época y otra muy escasa bibliografía.
De la lista presentada por el presidente municipal se
desprende que fueron 4 americanos y 17 mexicanos los muertos, incluyendo los
calcinados no identificados; además, que fueron heridos 7 americanos y 12
mexicanos.
LISTA DE FILIBERTO VAZQUEZ BARROSO
|
|||
MUERTOS
|
HERIDOS
|
||
AMERICANOS
|
MEXICANOS
|
AMERICANOS
|
MEXICANOS
|
01/06/1906
|
01 y -02/06/1906
|
||
Geoge A. Metcalf
|
Jesus Carranco
|
William Randlph
|
Manuel Montijo
|
William D. Metcalf
|
José Verduzco
|
Clayton Kissel
|
Enrique Vizcarra
|
Dolores Valdepeña
|
A.E. Miller
|
Juan Ceta
|
|
N.N.
|
A.L. Brandden
|
Matías Soto
|
|
Indalecio Aldana
|
James McKeensie Nesbit
|
Prudencio Fierro
|
|
Librado Oceguera
|
Martin Weiss Kepff
|
Pablo Ocabache
|
|
Alberto Stone
|
L. Kemperman
|
Amado Pérez
|
|
Filomeno Morales
|
Desiderio Hernández
|
||
Petronilo Esparza
|
Lauro Flores
|
||
Pedro Amaya
|
Anastasio Salazar
|
||
N.N. (Calcinado)
|
Pedro Borrallo
|
||
N.N. (Calcinado)
|
Antonio Rodríguez
|
||
02/06/1906
|
|||
Best Rusles
|
Margarito N.
|
||
Conrad Cobler
|
Pedro Fimbres
|
||
Francisco Lara
|
|||
Crescencio Monroy
|
|||
Eugenio Mendivil
|
|||
Lista de muertos y heridos de Francisco R.
Almada
Francisco R. Almada, cuando se refiere a los muertos y
heridos de la huelga, nos dice que fueron 4 americanos y 19 mexicanos muertos,
sin mencionar a los calcinados que enlista Vázquez Barroso. Comparándola con la
lista oficial, además de los calcinados y que no incorpora el nombre de los
heridos solo mencionando que fueron 22, esta relación tiene otras diferencias,
ya que adicionalmente incluye como muertos los nombres de Enrique Vizcarra, Julio
Flores Juan Cota, y Manuel Montijo; personas que Vázquez Barroso las presenta
como heridas.
LISTA DE FRANCISCO R. ALMADA
|
|||
MUERTOS
|
HERIDOS
|
||
AMERICANOS
|
MEXICANOS
|
AMERICANOS
|
MEXICANOS
|
Junio/1906
|
Junio/1906
|
||
Geoge A. Metcalf
|
Manuel Montijo
|
22
|
|
William D. Metcalf
|
Jesús Carrasco
|
||
Alberto Rusk
|
José Orozco
|
||
Conrad Kubler
|
Doroteo Valdespeña
|
||
N.N.
|
|||
Indalecio Aldaco
|
|||
Librado Leyva
|
|||
Alberto Stone
|
|||
Filomeno Morales
|
|||
Petronilo López
|
|||
Pedro Amaya
|
|||
Margarito N.
|
|||
Pedro Fimbres
|
|||
Francisco Lara
|
|||
Crescencio Monroy
|
|||
Eugenio Mendivil
|
|||
Enrique Vizcarra
|
|||
Juan Cota
|
|||
Julio Flores
|
|||
Por otra parte, existen diferencias en cuanto a los nombres
y apellidos de algunos de ellos, ya que en la lista oficial aparece una persona
como Indalecio Aldana y en la de Almada aparece como Indalecio Aldaco, así
mismo, José Verduzco aparece como José Orozco, Jesús Carranco como Jesús
Carrasco, Librado Oceguera como Librado Leyva, Petronilo Esparza como Petronilo
López, Juan Ceta como Juan Cota, Lauro Flores como Julio Flores. Las
diferencias de apellidos y nombres, parecen ser errores de transcripción,
aunque es posible que en algunos de los casos, pudiera tratarse de personas
diferentes.
Lista de Mártires de la Huelga publicada en
el Semanario 1906
En el órgano de difusión de la Sección 65 del Sindicato
Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la
República Mexicana (SNTMMSSRM), el Semanario 1906 con fecha 1 de junio de 1964,
en un homenaje que se les hace a los Mártires de la Huelga, publica una
relación de 23 mártires, relación que es prácticamente igual a la de Almada,
con la diferencia que agrega a Jesús María Avilés e incorpora a Librado
Oceguera y a Librado Leyva como personas diferentes, además de ponerle apellido
a Margarito N. (Navarro) y agrega a los calcinados.
LISTA DE MARTIRES
|
|
SEMANARIO 1906
01/06/1964
|
|
Jesús María Avilés
|
N.N.
|
Doroteo Valdespeña
|
Margarito Navarro
|
Filomeno Morales
|
Crescencio Monroy
|
José Orozco
|
Enrique Vizcarra
|
Manuel Montijo
|
Pedro Fimbres
|
Pedro Amaya
|
Eugenio Mendivil
|
Petronilo López
|
Francisco Lara
|
Jesús Carrasco
|
Juan Cota
|
Alberto Stone
|
Julio Torres
|
Librado Leyva
|
N.N. (Calcinado)
|
Librado Oceguera
|
N.N. (Calcinado)
|
Indalecio Aldaco
|
|
CONCLUSIONES
De acuerdo a lo contabilizado en los cuatro eventos en
los que se dividieron los sucesos de la huelga, hasta la aprehensión de los
últimos lideres anarco-magonistas, como mínimo hubo un total de 36 mexicanos, 2
N.N. calcinados y 10 americanos muertos, incluyendo a las personas inocentes
que murieron incidental o premeditadamente.
TOTAL DE MUERTOS DURANTE LOS EVENTOS
DE LA HUELGA
|
|||||
NACIONALIDAD
|
1er EVENTO
|
2do EVENTO
|
3er EVENTO
|
4to EVENTO
|
TOTAL
|
MEXICANOS
|
5 a 10
|
7 a 11
|
15 a 30
|
9 a ??
|
36 a ??
|
N.N. CALCINADOS
|
2
|
0
|
0
|
0
|
2
|
AMERICANOS
|
6
|
0
|
4 a 9
|
0
|
10 a 15
|
TOTAL*
|
13-18
|
7 a 11
|
19 a 39
|
9 a ??
|
48 a ??
|
*Incluye personas
inocentes
|
|||||
El total de heridos es difícil de establecer ya que la
inmensa mayoría no fueron registrados por los periódicos o informes y solo se
habla de hubo muchos heridos, sin embargo, Juan Manuel Silva R. dice que fueron
50 mexicanos los heridos en los tres días de los enfrentamientos (1-3 de
junio), que incluyen los 4 eventos analizados.
En los diferentes informes y publicaciones
que se conocieron durante o después de los eventos de la huelga, respecto a los
muertos, se publicaron un sinnúmero de versiones. En la tabla se muestran
algunas de ellas, que ya sea por la fuente de donde provienen o por estimarlas
como las más apegadas a la realidad, se consideran las más importantes.
MUERTOS
|
FUENTE
|
OCUPACION
|
FECHA
|
MEDIO
|
PERIODO
|
|
MEX
|
AMER
|
|||||
34
a 40
|
6
|
W.B. Kelley
|
Editor Bisbee Daily Review
|
03/06/1906
|
Arizona Silver Belt
|
1 y 2 de junio
|
50
a 60
|
12
|
Colin Bury
|
Empleado CCCC
|
03/06/1906
|
Carta a su madre
|
1 a 3 de junio
|
30
|
2
|
Cap. Rynning
|
Rangers
|
04/06/1906
|
Arizona Republican
|
1 y 2 de junio
|
100*
|
20*
|
Teniente Wheeler
|
Rangers
|
04/06/1906
|
Telegrama a Gob. Ariz.
|
1 a 3 de junio
|
36
|
6
|
Los Angeles Herald
|
Associated Press.
|
04/06/1906
|
Los Angeles Herald
|
1 a 3 de junio
|
7
|
2
|
Francisco Mallen
|
Consul Mex. El Paso
|
05/06/1906
|
Arizona Republican
|
1 a 3 de junio
|
16
|
3
|
William C. Greene
|
Presidente CCCC
|
05/06/1906
|
Los Angeles Herald
|
1 a 3 de junio
|
14
|
6
|
Epes Randolph
|
Gerente del S. P. FFCC
|
06/06/1906
|
San Francisco Call
|
1 a 3 de junio
|
16
|
5
|
Izabal y Torres
|
Gob. Son. y Gral. Ejerc.
|
07/06/1906
|
San Francisco Call
|
1 a 3 de junio
|
*Incluye
muertos y heridos
|
||||||
De las publicadas, las cifras más realistas, comparadas
con el análisis realizado de los 4 eventos, son las aportadas por Colin Bury en
la carta a su madre donde dice que fueron entre 50 y 60 mexicanos y 12
americanos muertos. De la misma manera, las cifras aportadas por el Teniente
Wheeler de los Rangers de Arizona, en su telegrama al Gobernador de Arizona Joseph
Henry Kibbey, donde dice que fueron 100 los muertos y heridos mexicanos, sí consideramos
que fueron 50 los heridos según Juan Manuel Silva R., los muertos mexicanos
serían 50, cifra similar a la de Colin Bury y la resultante del análisis de los
eventos. En cuanto a los americanos muertos, Wheeler dice que fueron 20 entre
muertos y heridos, si consideramos los heridos resultantes del análisis y los
que se atendían en el hospital de la Empresa, obtenemos 8 heridos en total, de
esta manera, tenemos que serían 12 los americanos muertos, cifra similar a la
obtenida en el análisis e igual a la mencionada por Colin Bury.De la tabla resaltan las cifras declaradas por el Cónsul
Mexicano en El Paso, Tx, siendo estas las más bajas de todas, por lo que se
interpreta la gran manipulación de los eventos de la huelga por el Gobierno de
Porfirio Díaz, a través de la Secretaría de Relaciones Internacionales,
tratando de minimizar el impacto de la torpe actuación del Gobernador de Sonora
Rafael Izábal y de su política de represión.
Así mismo, en el tema de los presos algunos documentos
hablan que hubo del orden de 100 encarcelados mexicanos por participar en la
huelga. Jorge Sayeg Helú dice: justo es señalar, que además muchos de los luchadores
y participantes de la huelga, cuyos nombres habrían de perderse en el
anonimato, existen otros que fueron detenidos y encarcelados: Tomás Rico, Pedro
Bonilla, Vicente Moreno, José López, Telésforo Martínez, Juan Padilla, Sabino
López, Alejandro Aragón, Felipe Godoy, Manuel León, Lázaro Montalvo, Ricardo
O’Farril, Manuel Escandón, Fermín García, Rafael Parra, Cesáreo Flores, Ignacio
Paco, Teodoro Miranda, Feliciano Rodríguez, Vicente de la Rosa, Federico Rezas,
Jesús P. Preciado, Higinio L López, Pedro Lara, Jesús M Carrigoza, Carlos
Guerra, Pascual García, Jesús P. Preciado, Eusebia Luna, Manuel Camarena, Rosendo
Aguirre, Crisanto L. Diéguez, Paula López, Candelaria Burgueño, Leonardo R.
López.
Concluyendo, podemos decir que el autoritarismo, la
prepotencia y la represión mediante el fusilamiento y ahorcamiento de mineros sellaron
la sentencia de muerte de la primera huelga obrera realizada por mexicanos en
el naciente municipio de Cananea, huelga en contra de la explotación, discriminación
y miseria laboral en la que se desenvolvían los obreros de las minas de Cananea
en la época del porfiriato.
En el plano se muestra la planeación urbana
de la época de la huelga, donde se localizaron los edificios y lugares donde se
desarrollaron los principales eventos de la huelga, para una mejor comprensión
del desarrollo del movimiento de huelga.
 |
| Geografía de los eventos principales de la Huelga de Cananea (Elaboró: G. Moreno) |
BIBLIOGRAFÍA
Aguirre, Manuel J.- Cananea: Las Garras
del Imperialismo en las Entrañas de México. Libro Mex Editores, México, 1958.
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Instituto Nacional de Estudios
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Tomo I SEP/SEDENA. México, 2014.
Kaplan, Samuel/ Flores Magón, Enrique.-
Peleamos Contra la Injusticia. Libro 1. STIRT, CTM, UAS, Editorial UAS y
Contrapunto 14. Edición corregida y aumentada. Enero del 2006.
Morales Tapia, Jesús.- Reivindicaciones
de un Minero en Kaplan, Samuel/ Flores Magón, Enrique.- Peleamos Contra la
Injusticia. Libro 1. STIRT, CTM, UAS, Editorial UAS y Contrapunto 14. Edición
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Cananea en Garciadiego, Javier.- Textos de la Revolución Mexicana. Fundación
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Semanario
1906, Junio 01, 1964.
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